Si entras en Youtube y tecleas Guadix te puedes encontrar muchos vídeos sobre Guadix. Algunos son auténticas chorradas pero otros pueden servirnos para ver como era la ciudad hace unos años.
En el fragmento que presento a continuación se puede apreciar como era la plaza de la Ermita Nueva en el año 1967.
En esta secuencia podemos ver un fragmento de la película "Siete novias para los McGregor".
Podemos distinguir la cueva que usó el padre Poveda, la entrada de la taberna de Marín y la cueva que hoy está dedicada a venta de recuerdos turísticos frente a la iglesia. La mujer que se ríe a carcajadas en primer plano, no sé si aún vive, es de la zona de las cuevas.
Los extras deben de ser de Guadix aunque por la calidad de la imagen no los identifico
En un rincón hermoso/ de Andalucía,/Hay un valle risueño.../¡Dios lo bendiga!/ Que en ese valle/ Tengo amigos, amores,/ Hermanos, padres .../ P.A. de Alarcón
viernes, 17 de julio de 2009
domingo, 12 de julio de 2009
Sonidos
Escribía la semana pasada los ruidos que contaminan nuestro entorno como eran las motos a escape libre y las terrazas de verano.
Hoy voy a escribir algo sobre sonidos agradables de mi ciudad.
Unos amigos míos que residen en la ciudad de aluvión que es la capital del reino se quejan de que Guadix es ruidoso, de que no se puede dormir. Entre los ruidos molestos para ellos se encuentran: las campanas, los pájaros piando al amanecer, las vecinas barriendo la puerta, el repartidor del pan. ¿Se dan ellos cuenta de la cantidad de ruidos que soportan en la gran ciudad? ¿No es más agradable despertarse con el piar de los pájaros que con el ruido atronador de sirenas, martillos neumáticos, vehículos de todo tipo, etc? ¿Sabrán apreciar el canto del ruiseñor en los huertos cercanos? ¿Habrán escuchado alguna vez una lechuza en el campanario de una iglesia o convento? Seguro que lo han escuchado pero lo olvidaron a propósito cuando se fueron de aquí creyendo que lo foráneo era lo mejor, el progreso, el no va más. Aquí nos quedamos los paletos, los que no sabemos vivir la vida y disfrutar de las maravillas de la gran urbe ¡como si allí todo fuera jauja y ataran los perros con longaniza!
Ellos nunca sabrán apreciar la belleza del sonido de una campana al amanecer -mi padre dice que las campanas de la catedral de antes de la guerra sonaban más finas-, el parloteo de las vecinas al barrer la puerta y el rasgar de la escoba en el suelo de la calle mientras se cuentan las últimas noticias acaecidas en el barrio; la lluvia golpeando los cristales y haciendo quejarse a los árboles durante las noches de tormenta, en una palabra los sonidos naturales de una pequeña ciudad que tiene su encanto y en la que se vive muy bien aunque no tengamos tantas modernidades.
Ahora que estáis aquí abrid vuestros oídos y vuestros sentidos y descubriréis a Guadix a la ciudad donde nacisteis con sus luces y sus sombras.
sábado, 4 de julio de 2009
Ruidos
Son muchos los amigos y conocidos que se dirigen a mí para decirme que me leen semanalmente y que buscan mi colaboración en Wadi-As. Esto me anima a seguir escribiendo y contando como veo mi ciudad y la comarca donde nací, donde vivo una parte del año y a la que pienso volver de forma permanente. A todos vosotros muchas gracias por vuestro apoyo, ¡creí que nadie me leía! Ahora mismo cuando aporreceo las teclas del ordenador pienso que vosotros, amigos, estáis al otro lado.
El domingo pasado, día del Corpus, mi buen amigo A..... me sugería que escribiera algo sobre los ruidos que padecemos y sufrimos, sobre todo los de las motos, y es que cada día son más los que usan los ciclomotores para desplazarse por la ciudad, pero eso que debiera ayudar a mejorar el tráfico rodado no siempre es así y además, con la moda de quitarles el silenciador al tubo de escape, producen unos ruidos que molestan bastante sobre todo cuando los que conducen estos vehículos duermen de día y salen de noche.
No es nada agradable, ahora en el verano, despertarte con el ruido atronador que provocan estas máquinas que es aumentado cuando circulan por una calle estrecha y empinada en la que hay que retorcerle el manillar más de la cuenta porque casi siempre llevan a alguien de paquete y el motor no puede con tanto.
Otra cosa que molesta lo suyo son las discotecas ambulantes. Llamo así a los que llaman la atención con el equipo de música de su coche a todo volumen. Podrían buscar otra forma menos ruidosa de no pasar desapercibidos.
Tendríamos que poner todos de nuestra parte para evitar estos ruidos y muchos más como la música a tope en las viviendas, el taladro del vecino que hace el bricolage doméstico los domingos por la mañana temprano, etc. y ahora, el no fuerte pero constante y monótono de las terrazas de verano en las que muchos nos sentamos y no pensamos en que hay vecinos que intentan conciliar el sueño porque mañana hay que trabajar o personas enfermas que deben de descansar.
Entre todos podemos hacer una ciudad menos contaminada acústicamente
El domingo pasado, día del Corpus, mi buen amigo A..... me sugería que escribiera algo sobre los ruidos que padecemos y sufrimos, sobre todo los de las motos, y es que cada día son más los que usan los ciclomotores para desplazarse por la ciudad, pero eso que debiera ayudar a mejorar el tráfico rodado no siempre es así y además, con la moda de quitarles el silenciador al tubo de escape, producen unos ruidos que molestan bastante sobre todo cuando los que conducen estos vehículos duermen de día y salen de noche.
No es nada agradable, ahora en el verano, despertarte con el ruido atronador que provocan estas máquinas que es aumentado cuando circulan por una calle estrecha y empinada en la que hay que retorcerle el manillar más de la cuenta porque casi siempre llevan a alguien de paquete y el motor no puede con tanto.
Otra cosa que molesta lo suyo son las discotecas ambulantes. Llamo así a los que llaman la atención con el equipo de música de su coche a todo volumen. Podrían buscar otra forma menos ruidosa de no pasar desapercibidos.
Tendríamos que poner todos de nuestra parte para evitar estos ruidos y muchos más como la música a tope en las viviendas, el taladro del vecino que hace el bricolage doméstico los domingos por la mañana temprano, etc. y ahora, el no fuerte pero constante y monótono de las terrazas de verano en las que muchos nos sentamos y no pensamos en que hay vecinos que intentan conciliar el sueño porque mañana hay que trabajar o personas enfermas que deben de descansar.
Entre todos podemos hacer una ciudad menos contaminada acústicamente
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